Ante un caso de impotencia es importante conocer el origen del problema y el urólogo es el especialista que puede encontrarlo.
Algunos de los casos pueden estar provocados por una pérdida de elasticidad arterial, con lo que la impotencia podría ser un aviso temprano de futuros problemas de salud como infarto de miocardio, angina de pecho o accidentes cerebrovasculares.
Lo importante ante un problema de impotencia es abordar el problema de raíz, hablarlo con la pareja y acudir al urólogo para determinar su causa y buscar un tratamiento eficaz.
Los problemas de impotencia repercuten negativamente en las relaciones de pareja. En el hombre suelen aparecer sentimientos de culpabilidad y falta de seguridad. Por su parte, en la mujer suelen provocar una baja autoestima y una sensación de no despertar el deseo sexual en la pareja.
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